Acta Benedicti Pp. XVI 771

and choice wines'' of the heavenly kingdom.5 She wrote, ''I consider a day

without suffering as a day lost''. May we imitate her in shouldering our own

crosses so as to join her one day in paradise.

La joven laica ecuatoriana Narcisa de Jesús Martillo Morán nos ofrece un

ejemplo acabado de respuesta pronta y generosa a la invitación que el Señor

nos hace a participar de su amor. Ya desde una edad muy temprana, al

recibir el sacramento de la Confirmación, sintió clara en su corazón la llamada

a vivir una vida de santidad y de entrega a Dios. Para secundar con docilidad

la acción del Espı́ritu Santo en su alma, buscó siempre el consejo y la guı́a de

buenos y expertos sacerdotes, considerando la dirección espiritual como uno

de los medios más eficaces para llegar a la santificación. Santa Narcisa de

Jesús nos muestra un camino de perfección cristiana asequible a todos los

fieles. A pesar de las abundantes y extraordinarias gracias recibidas, su exis-

tencia transcurrió con gran sencillez, dedicada a su trabajo como costurera y

a su apostolado como catequista. En su amor apasionado a Jesús, que la llevó

a emprender un camino de intensa oración y mortificación, y a identificarse

cada vez más con el misterio de la Cruz, nos ofrece un testimonio atrayente y

un ejemplo acabado de una vida totalmente dedicada a Dios y a los hermanos.

Cari fratelli e sorelle, rendiamo grazie al Signore per il dono della santità,

che quest'oggi rifulge nella Chiesa con singolare bellezza. Gesù invita ciascuno

di noi a seguirlo, come questi Santi, nel cammino della croce, per avere poi in

eredità la vita eterna di cui Egli morendo ci ha fatto dono. I loro esempi ci

siano di incoraggiamento; gli insegnamenti ci orientino e confortino; l'inter-

cessione ci sostenga nelle fatiche del quotidiano, perché anche noi possiamo

giungere un giorno a condividere con loro e con tutti i santi la gioia dell'e-

terno banchetto nella Gerusalemme celeste. Ci ottenga questa grazia soprat-

tutto Maria, la Regina dei Santi, che in questo mese di ottobre veneriamo con

particolare devozione. Amen.

5 Cfr Is 25:6.